El Club Talleres se convirtió en el escenario de un emotivo pesebre criollo, una celebración que reunió a los taficeños gracias a la organización del taller de canto folclórico y la academia de danzas folclóricas de Villa Obrera, bajo la dirección de la profesora Mabel Gutiérrez. Este evento, que tuvo lugar en un ambiente festivo y familiar, convocó a más de 40 personas, incluyendo a padres, niños y adolescentes que participan activamente en las actividades del taller día a día, promoviendo el fortalecimiento de los lazos culturales y comunitarios.
La representación del nacimiento de nuestro Señor Jesús fue llevada a cabo por los vecinos de Villa Obrera, quienes se involucraron de manera entusiasta, reflejando no solo su talento artístico, sino también su deseo de compartir tradiciones y mantener vivas las raíces culturales. La colaboración y el trabajo en equipo fueron evidentes, con padres que se sumaron para ayudar en la organización y montaje del pesebre, haciendo de esta una experiencia colectiva y significativa.
El secretario de Desarrollo Social, Maximiliano Bevacqua, fue uno de los presentes que apoyó la iniciativa, destacando la importancia de tales eventos para la cohesión social. Fernando Serrano, director del espacio Villa Obrera, se mostró emocionado durante su discurso, afirmando: “Fue una jornada muy emotiva ver esta representación del nacimiento de nuestro Señor Jesús, realizada por vecinos de nuestra Villa Obrera. Queremos agradecer a los directivos del Club Talleres por prestarnos sus instalaciones, así como a nuestra intendenta, Alejandra Rodríguez, por su apuesta y compromiso con nosotros”.
El pesebre no solo logró resaltar la importancia de las tradiciones navideñas, sino que también se erigió como un punto de encuentro donde la comunidad pudo celebrar su identidad cultural. La jornada terminó con un espíritu de alegría y unión, dejando a todos los asistentes con una sensación de pertenencia y orgullo por su localidad y sus tradiciones.