En una jornada histórica para la provincia, autoridades provinciales, municipales y de la empresa Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) celebraron la puesta en funcionamiento de la toma flotante Balsa "La Niña", ubicada en el embudo del Dique Celestino Gelsi, El Cadillal. Este proyecto no solo representa una inversión en infraestructura, sino también un avance significativo en la provisión de agua potable para la ciudad de San Miguel de Tucumán y su área metropolitana.
La balsa, que fue instalada hace más de 20 años y nunca había sido reparada ni mantenida adecuadamente, ha recibido una renovación completa bajo la gestión del gobierno provincial. La intendenta Alejandra Rodríguez, señaló que "el objetivo principal es garantizar la continuidad de la provisión de agua potable, pero con mejoras sustanciales que buscan la eficiencia y la sostenibilidad del sistema".
Uno de los mayores logros de este proceso de restauración fue la sustitución de los antiguos flotadores, que presentaban filtraciones peligrosas y el riesgo de hundimiento. También, se reemplazaron los motores de explosión por motores eléctricos, eliminando de esta manera el uso de combustible y aceites que podrían haber contaminado el agua del dique.
Además, la incorporación de una nueva bomba importada, con una capacidad de bombeo de 6.000 metros cúbicos, triplica la capacidad de la bomba anterior, lo que aumentará significativamente la provisión de agua dulce tratada para la población.
El gobernador Osvaldo Jaldo, acompañado por el presidente de la SAT, Marcelo Caponio, y los intendentes de la provincia, destacó que esta obra es una de las muchas mejoras en infraestructura hídrica impulsadas por el gobierno provincial. "Hoy, estamos asegurando que Tucumán cuente con más y mejor agua potable, un recurso vital para nuestra gente", afirmó Jaldo.
La restauración de la Balsa "La Niña" forma parte de un compromiso más amplio para mejorar el sistema de provisión de agua potable en la provincia. A través de la incorporación de tecnología de punta, como motores eléctricos y bombas de mayor capacidad, Tucumán avanza hacia un modelo más moderno y sostenible en la gestión de sus recursos hídricos.
Este proyecto no solo atiende una necesidad urgente de la población, sino que también pone de manifiesto el compromiso del gobierno provincial con el cuidado del medio ambiente y la sostenibilidad a largo plazo.
Gracias a esta importante restauración, la capacidad de abastecimiento de agua potable en San Miguel de Tucumán se verá significativamente incrementada, lo que mejorará la calidad de vida de miles de tucumanos. Con esta intervención, el dique de El Cadillal, uno de los principales recursos hídricos de la provincia, continuará siendo un punto clave en el abastecimiento de agua para la región, garantizando que este recurso esencial esté disponible para las generaciones futuras.
La restauración de la Balsa "La Niña" es, sin duda, un ejemplo de cómo la inversión en infraestructura no solo mejora los servicios esenciales, sino que también promueve el desarrollo y el bienestar de la comunidad.
